Un espacio destinado a charlar acerca del cine, saboreando una taza de café (puede que más), sentados en torno a una mesa. Por el simple gusto de hablar por hablar acerca de una pasión compartida por una reducida infinidad, así nomás como son estas cosas.

Bienvenidos a mi hogar. Entren libremente. Pasen sin temor. ¡Y dejen en él un poco de la felicidad que traen consigo!

miércoles, 17 de septiembre de 2008

ESCOGÍ UN MAL MOMENTO PARA NO DEJAR DE VER LA TELEVISIÓN

Por diversas razones que ahora mismo no vienen al caso en el piso que comparto no disponemos de televisión. El hueco del mueble donde debería ubicarse ese electrodoméstico se encuentra en cambio ocupado por un elemento mucho más simple, la blanca pared, sin que por el momento ninguno de los inquilinos hayamos pensado en rellenarlo. Porque, ¿para qué íbamos a hacer tal cosa si disponemos de un proyector de vídeo que mediante un simple cable puede conectarse al ordenador portátil? La consecuencia inmediata de lo que podría parecer mera desidia es que así disponemos de una fantástica pantalla sobre la que proyectar nuestra cada vez más nutrida colección de DVDs (un ritmo de crecimiento que mucho me temo sea inversamente proporcional a los fondos disponibles para mantenerlo).

Sin embargo a la hora de la comida, un refrigerio rápido que debe solventarse mediante el menú del día (cuestiones del apretado horario laboral de un pluriempleado), de vez en cuando me dejo atraer por la cantinela procedente del televisor que preside el establecimiento. Fue así como me di de bruces con el spot en el que una compañía de telefonía móvil emplea una escena de "El Jovencito Frankenstein" ("Young Frankenstein", Mel Brooks, 1974), en la que el Dr. Frankenstein y su criatura interpretan el clásico "Puttin´ on the Ritz".
Ahí dieron comienzo los problemas.
Al punto vinieron a mi cabeza unas danzantes imágenes en blanco y negro, al tiempo que una característica musiquilla de violín resonaba en mis oídos. Ahí estaba, el recuerdo había regresado.



Esa melodía característica


Porque cómo podría haberme olvidado de aquellos momentos hilarantes que me procuraron Gene Wilder (el Dr. Frankenstein), Martin Boyle (caracterizado como aquel monstruo tierno y encantador, con permiso de Boris Karloff), Marty Feldman (el inigualable Igor, con su mirada saltarina), o Cloris Leachman y Teri Garr en sus papeles de pareja del monstruo y del doctor, respectivamente; y todos ellos bajo la batuta del prolífico Mel Brooks.
Tras una experiencia así uno hasta llega a perdonarle a este hombre el que no hubiera respetado la memoria de Lubitsch.

A la salida del local sentí que era un poco más pobre, no por el desembolso de dinero como pago del menú sino porque era consciente de algo mucho más importante: debería ahorrar para comprarme ese DVD como forma de poder gozar de la película en el humilde cine-salón.



"El Jovencito Frankenstein" ("Young Frankenstein", Mel Brooks, 1974)

10 comentarios:

Elphaba dijo...

A esta última escena le tengo un recuerdo especial. Tenía una tía abuela muy mayor que ya estaba en la silla de ruedas, apenas hablaba y su cabeza casi nunca parecía estar ya en su sitio, pero estaban poniendo esta peli en la tele y tras salir esta escena la veo temblar. Miro, y estaba partida de risa!! Es el último recuerdo bonito que tengo suyo.

G. K. Dexter dijo...

Me alegra que te haya traído a la mente un buen recuerdo. Qué sería de nosotros sin esa magia que nos rodea cuando visionamos una película: un olor, la reacción de los seres queridos que nos rodean, una época,...

Un saludo cinéfilo.

Sergio Arán dijo...

Pues yo recuerdo a Gene Hackman haciendo de ciego. Una escena memorable.
Decía Pumares que a Brooks esta película se la hicieron, porque era imposible que un director tan malo hiciera una obra maestra como esta.
Gran película.

G. K. Dexter dijo...

Nada, Sergio, que me he tenido que matar el gusanillo y me acabo de visionar en Youtube la escena del ciego y el monstruo.
Espero sinceramente que mis carcajadas no hayan llegado a despertar a los vecinos de puerta.

Sobre Pumares confieso que sólo he escuchado anécdotas acerca de sus opiniones cinematográficas, comentarios procedentes de algunos amigos que sí le escuchaban a menudo. Yo llegué al mundillo de los programas de radio con tema cinematográfico de la mano de Teófilo "el necrófilo". Respecto a la opinión que cita, y según lo que ellos me contaban, sin duda se encuentra en su línea irónica habitual.

Un saludo cinéfilo.

Elphaba dijo...

Uy, algún día contaré mi primera experiencia cinéfila-radiofónica, cuando con 11 años entré en directo a un programa a discutir con el presentador porqué me parecía muy mala una cosa en una peli xDDD.
Muy buena la escena del ciego, cierto jejejeje.

Anónimo dijo...

Grandísima película. Creo que es la primera peli que vimos en casa cuando, siendo un crío, mis padres compraron el primer VHS. La trajo una tía mía diciendo que no podíamos perdérnosla. No se equivocó, desde luego.

Tiene tal cantidad de gags memorables que ha pasado por derecho propio a ser una de las grandes comedias. Y anda que no hemos utilizado los amigos la coña esa de ¡Frau Blüher! y el relincho de los caballos.

Enorme Marty Feldman. Y sobre Teri Garr qué voy a decir... "Vaya par de aldabas". XDDDD

Gloria dijo...

Hombre, yo no creo que a Brooks le escribieran o dirigieran nada manos ajenas: pensad que era entre otras cosas, guionista del superagente 89... Y de hecho, si veis otras películas suyas, es el mismo tipo de humor... simplemente, aquí le salió un filme absolutamente redondo, tal vez porque James Whale, autor de las películas originales, tenía un gran sentido del humor, y a Brooks le bastó con "empujar" un poquito escenas míticas hacia el lado de la parodia para hacernos reir a carcajadas.

Y por cierto, aunque yo si que tengo tele, cada vez me deacnto más a usarla como DVD-cine, porque así entre nosotros, para ver mayormente futbol, cotilleos y reality shows más falsos que un duro sevillano, una se hace su propio ciclo de cine, y el resto, se lo pasa pipa visitando blogs mucho más interesantes que las tonterias que hay que oirle a "expertos tertulianos" de la TV.

Por cierto, ya ni de los canales de pago te puedes esperar nada que valga la pena: por ejemplo el canal Turner Classic Movies va a dedicarle el mes de noviembre a Charles Laughton... que podremos ver en la versión española de Turner Classic Movies? Pues el "Cine Derribo" -quiero decir, "Cine de Barrio- que tenemos más visto que el TBO. ¡Pais! que diría el gran Antonio Fraguas.

Suerte que nos queda París, el DVD multizona y la "Mula Francis"

Landi dijo...

Mel Brooks, me ha parecido siempre un director fuera de convencionalismos y con un humor delirante aunque sus últimas películas decepcionaran un poco. La secuencia con Gene Hackman y la 'criaturita', divertidísima. Mis carcajadas,podrían competir con las suyas, jajaja. Saludos G.K.Dexter.

Anónimo dijo...

Alberto Q.
www.lacoctelera.com/traslaspuertas

Ese DVD que ud. aprecia tanto está justo enfrente de mí ahora (aunque no es mío, sino de mi hermano). Es una película que reúne muchos requisitos buenos (en mi opinión).

El humor, los actores adecuados, escenas de misterio, una historia atractiva, la música estupenda...

Una maravilla en general que he visto varias veces y siempre me deja buen sabor de boca.
Grande nuestro FRONKOSTIN particular (Gene Wilder) y el sr. Igor, por supuesto.

Saludos desde Madrid!

G. K. Dexter dijo...

Elphaba.
Aguardaremos a la espera de que nos explique más pormenorizadamente su precocidad como crítica cinematográfica en los medios.

Aurë.
Curioso eso que cita acerca de que ésta fuera la primera película que vio en vídeo VHS en su domicilio. En mi caso se trató de “El mundo está loco, loco, loco, loco”, y yo no contaría más que con unos once o doce años; la elección de la película fue cosa mía, y aún no sé qué fue lo que más me llamó la atención cuando la encontré en el estante de aquel videoclub.
Por supuesto desde hace unos meses ese DVD ya forma parte de mi minicolección: pude constatar que me seguía produciendo la misma gracia que en aquel entonces.

Gloria.
Como seguidor de la serie del Superagente 86 estoy con usted en lo que a la pericia del Brooks se refiere. Si incluso cuando era niño me dedicaba a tomar notas de los delirantes diálogos de este peculiar ¿profesional?, 99 y el jefe… En todo caso hay que matizar que en esta película buena parte del guión (su esencia) corresponde a Gene Wilder y que Brooks actuó como co-guionista; sin que pretenda con ello arrebatarle méritos. En cuanto a lo demás sin duda se percibe un sumo cuidado en la producción, casi podría hablarse de mimo, hasta el punto de que se recrea incluso la fotografía de los clásicos de terror de la Universal. Y por supuesto el reparto está logradísimo.

Landi.
Espero que sus vecinos hayan resultado ser tan comprensivos como los míos. Por el momento nuestra vivienda no figura en el tablón de anuncios del portal. xD

Alberto Q.
Qué quiere que le explique… Tras un intenso debate conmigo mismo he acordado una prórroga del presupuesto, combinada con un préstamo sindicado a mí mismo (pura ingeniería financiera de andar por casa, a qué engañarse). Como resultado ya he encargado el DVD por Internet.
Esta película posee todo lo que usted dice, y espero corroborarlo (de eso no me cabe duda) en cuanto pueda disfrutarlo en mi cine-casa.


Un saludo cinéfilo para todos.

P.D.: espero que Sacha se esmerara con los cafelitos; la semana pasada tuvimos que cambiar el circuito de agua y quizás el sabor se haya resentido un tanto.